post express

¡Hola! Me asomo por aquí para que no penséis que he desaparecido o me he mudado de planeta. El caso es que tengo muchas ideas sobre lo que escribir y muy poco tiempo para teclear. Pero no os preocupéis, lo tengo todo en mi cabeza.

Hoy estaba sentada en mi puesto de trabajo, donde llevo poco más de un mes, estrenando la taza nueva que me regaló mi hermano hace una semana cuando fuimos a ver la exposición de DC Comics que está éstos días en Madrid. Al terminar de ver la exposición, en la tienda de regalos, entre cientos de comics y camisetas de superhéroes, vi unas tazas, había una del Daily Planet que me gustó, y dije, más para mi misma que para mis oyentes: «tengo que llevarme una taza al trabajo y dejar de tomar el café de máquina que me sabe a rayos». Mi hermano simplemente cogió la taza y me la regaló. Y hoy, tomándome mi primer café en mi taza nueva, en mi nuevo trabajo donde estoy realmente agusto, me he sentido feliz. Seguramente aquel día mi hermano se gastó más en mi, en invitarme a comer, en la entrada del cine esa misma tarde, etc, etc…que lo que le costó la taza, pero fue lo que más me gustó del día, porque cada vez que me tome un café, recordaré el día completo, el estar con mis hermanos y amigos compartiendo risas y conversaciones, agradecida por tenerles conmigo. Porque la felicidad la componen los pequeños detalles; la felicidad está hecha de los momentos que coleccionamos y que componen nuestra vida. No hace falta tener mucho de todo, o hacer una performance de tu vida social para que parezca que te lo pasas mejor que nadie. Simplemente sal cada día a la calle y déjate envolver por la belleza de las cosas pequeñas. Sé feliz.

¡Volveré pronto! No os vayáis muy lejos que tengo muchas cosas que contaros mis queridas Curvys.

Diana.